Seguidamente comenzaremos una serie de artículos enfocados en el saneamiento y la mejora de nuestras finanzas personales. Algunos asuntos por desarrollar son: la creación de un presupuesto, el manejo de las deudas, controlar los gastos, las inversiones, y el tópico de hoy, maximizar los ingresos.
Mejorando Nuestras Finanzas: Maximizar los Ingresos
Obtener uno o varios ascensos en el trabajo
Si hemos ingresado a una empresa que permite el crecimiento laboral por meritocracia (méritos propios y resultados), y donde los aumentos salariales valen la pena (al menos hasta donde conocemos), entonces podríamos aspirar a escalar organizacionalmente para incrementar nuestros ingresos.
Ascender en el trabajo hasta un punto en que los ingresos excedan a los gastos podría tomar un esfuerzo y tiempo significativos y paciencia. Pero esto no debería asustarnos, pues la Palabra de Dios recomienda en Proverbios 13:11[1] “La riqueza lograda de la noche a la mañana pronto desaparece; pero la que es fruto del arduo trabajo aumenta con el tiempo.”
Una de las primeras preguntas que surge es: ¿qué necesitamos hacer o tener para ascender la escalera organizacional? Muchos libros se han escrito y consejos se han dado sobre el tema, pero nos centraremos en unos cuantos, los cuales encontramos en la Biblia:
- Diligencia: La Palabra de Dios dice en Proverbios 12:24: “La mano de los diligentes señoreará; Mas la negligencia será tributaria”. El trabajador diligente se esfuerza por hacer lo que se le pide, pronto, con cuidado y minuciosidad. No hace falta decir que un enemigo de la diligencia y del crecimiento organizacional se llama pereza. Para más detalles sobre la diligencia, ver la sección del blog que tiene ese nombre.
- Habilidad en el trabajo: En Proverbios 22:29[2] leemos “¿Has visto a alguien realmente hábil en su trabajo? Servirá a los reyes en lugar de trabajar para la gente común”. De manera que la inversión de tiempo que hacemos para incrementar nuestras habilidades en áreas relevantes para nuestro trabajo será crucial para alcanzar nuestros objetivos
- Resultados para la organización: Aquí se vuelve esencial entender qué necesita la empresa para la cual laboramos y enfocarnos en obtener logros significativos de acuerdo con las necesidades. Para ello, obviamente nuestro jefe debería ser una fuente de conocimiento relevante. En la Biblia vemos en Proverbios 27:18[3]: “Quien cuida la higuera comerá su fruto, Y el que mira por los intereses de su señor, tendrá honra”.
Fuente Adicional de Ingresos o Emprendimientos
Existen algunas personas para las cuales el aumentar sus ingresos por medio del crecimiento organizacional no se constituye en la mejor opción. Algunas de las razones más comunes son:
- No se labora para una entidad que permita el crecimiento organizacional, o bien, el aumento de ingresos sería limitado (por ejemplo, si se trabaja en una empresa pequeña o familiar con recursos limitados)
- Se dispone de un contrato de medio tiempo, sin haber opción a tiempo completo
- No se cuenta con estudios académicos o experiencia suficientes, y se vive en circunstancias que hacen difíciles cambiar esto
- Los objetivos personales no son consistentes con aumentar sus responsabilidades en una compañía
- El individuo tiene condiciones y circunstancias personales que son más apropiadas para lograr un emprendimiento exitoso que para subir organizacionalmente (por ejemplo, ventajas competitivas, habilidades específicas, activos o una red de contactos en el área)
Cualquier persona podría buscar una fuente de ingresos adicional, para mejorar o estabilizar sus finanzas personales. La Palabra de Dios afirma la importancia de mantenernos ocupados y hacer un buen uso del tiempo, en Eclesiastés 11:6[4] Siembra tu semilla por la mañana, y por la tarde no dejes de trabajar porque no sabes si la ganancia vendrá de una actividad o de la otra, o quizás de ambas”.
Es importante aclarar que no se debe descuidar el empleo principal (si se tiene) y mucho menos caer en un conflicto de intereses (nunca se debe utilizar el tiempo laborar o los activos de una empresa para conseguir otras entradas), ya que se podría perder el empleo y con ello nuestra fuente de ingresos.
Es necesario escuchar la voz de Dios y pedirle dirección entender qué estrategia laboral seguir. Para algunas personas la respuesta sería enfocarse en el trabajo principal para crecer (y no desenfocarse), pero otros individuos podrían optar por una segunda fuente de ingresos en su tiempo libre, o un emprendimiento. Recordemos que Dios nos habla de muchas maneras, pero especialmente por medio de su Palabra, las respuestas de oración, las circunstancias que vivimos, nuestra paz en el corazón y el consejo de personas maduras y de buenas intenciones.
Las Inversiones
En el sentido práctico, invertir es comprar activos esperando que aumente su valor en el tiempo. De esta manera, el inversor adquiere un bien o instrumento (una casa o apartamento, un taxi, un bono, o una acción, entre otros), con el fin de conseguir un retorno financiero en el futuro.
Las inversiones permiten aumentar nuestros bienes materiales en el futuro. Esto va más lejos que solo ahorrar el dinero, lo cual en primera instancia es positivo, pero tiene el inconveniente de no proteger contra la pérdida de valor en el tiempo (debido a la inflación). Tampoco suele generar un rendimiento financiero significativo.
La Palabra de Dios habla y aconseja acerca de las inversiones. Por ejemplo, en Eclesiastés 11:1-2[5] se menciona: “Envía tu grano por los mares, y a su tiempo recibirás ganancias. Coloca tus inversiones en varios lugares, porque no sabes qué riesgos podría haber más adelante”. Por tanto, se anima a invertir con paciencia y a diversificar el riesgo.
No obstante, invertir conlleva riesgos significativos que no deben ser ignorados. Entre ellos:
- Estafas o pirámides: Personas malintencionadas o manipuladas por una empresa, que prometen retornos irrealistas los cuales no llegan, o en el peor de los casos roban el dinero
- Malos activos o gestión inadecuada del riesgo: Activos legítimos, pero altamente riesgosos que pueden desaparecer o reducir su valor significativamente de la noche a la mañana
- Confusión entre “trading” (o especulación sobre instrumentos) y las inversiones: El primero podría llevarnos a perder mucho dinero, pues utiliza el apalancamiento, mientras que el segundo es más seguro pues solamente compramos el activo subyacente
- Malas decisiones: Ser llevados por las emociones o un juicio inadecuado, para vender o comprar un activo antes de tiempo
En conclusión, invertir adecuadamente preservaría y generalmente aumentaría el valor de nuestros activos, pero requiere educación previa para evitar sorpresas negativas.
Al aumentar nuestros ingresos estaremos dando pasos significativos para mejorar nuestras finanzas personales, lo cual deberá ser complementado con acciones que pretendemos examinar en siguientes artículos.
[1] NTV
[2] NTV
[3] RVA 1960
[4] NTV
[5] NTV
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